En el corazón de Salcedo, donde las montañas abrazan el cielo y las calles respiran calidez, nació en 1976 un sueño hecho luz: «Foto Londres Profesionales de la imagen». Su creadora, la Sra. Alicia Guerrero, una mujer visionaria oriunda de Quito, llegó a este encantador pueblo trayendo consigo no solo su cámara, sino también su carisma y profesionalismo.
La comunidad Salcedense, hospitalaria y noble, le abrió las puertas, y así comenzó una historia que se escribiría con destellos de luz y emociones eternizadas. Los primeros pasos fueron en blanco y negro, aquellos tiempos que la magia ocurría en la cámara oscura. Con químicos como el revelador y el fijador, se creaban recuerdos imborrables en un cuarto silencioso, donde cada fotografía era un acto de alquimia y arte.
Para los años 80, el estudio evolucionó con las películas de rollo, cuyos revelados se realizaban en laboratorios de ciudades como Cuenca y Quito. La fotografía se volvió más colorida, más viva, pero siempre con la misma esencia: capturar el alma de los momentos.